"Puede entregarle las llaves de la caja"

En 1964, don Aldemar ya vivía en Manizales y trabajaba como obrero de la construcción. De repente, una huelga de trabajadores de Cementos El Cairo en Santa Bárbara (Antioquia) se sale de control y se declara huelga nacional, perjudicando duramente el sector de la construcción. Pasan algunas semanas y don Aldemar no consigue trabajo, hasta que, por recomendación de una monja con la que trabajaba construcción los fines de semana, logra entrar a Herragro a trabajar como celador nocturno. Allí trabajaría durante 24 años hasta lograr su jubilación.

Don Aldemar nos cuenta qué sucedió en esas semanas. Para resaltar: la respuesta de la monja cuando el jefe de personal le pregunta si don Aldemar es una persona responsable y honrada: "Pueden entregarle las llaves de la caja".